miércoles, 5 de marzo de 2014

Capítulo 13.

 Unas horas luego de llegar a casa comencé a preparar la cena cuando el sonido del timbre me sobresaltó, Ash dejó la computadora sobre la mesa y caminó hacia la puerta, yo lo seguí y al abrir la puerta una bonita señora castaña clara se abalanzó hacia Ash envolviéndolo en un cálido abrazo.
-Hola mi pequeño, te extrañé mucho. -Al notar su acento inglés me di cuenta de que era su madre.
-Mamá, no me llames así, y yo también te extrañé. -Rodó los ojos haciendo que soltara una risita y ella posara sus intensos ojos azules en los míos. -Ella es _____, mi prometida. _____, ella es Cheryl, mi madre. -Le tendí la mano para estrechársela, pero para mi sorpresa me abrazó con cariño. 
-Oh querida, he esperado mucho para conocerte. Mi hijo me ha hablado muy bien sobre ti. No hemos tenido tiempo de venir ya que hemos tenido muchísimo trabajo, pero por fin pudimos conseguir las vacaciones que tanto necesitábamos. 
-Me alegro conocerla al fin señora Stymest, y me apena un poco que Ash haya alardeado sobre mi. -Soltó una risa.
-Sé que tiene toda la razón, pero llámame Cher por favor. -Me guiñó un ojo pero volví la vista hacia Ash que abrazaba a una jóven de casi la misma edad que él. 
-Estás enorme hermano. -Me tranquilicé mucho al oír éso y al observar su rostro, era muy parecida a Ashley.
-Tú no. -Contestó riendo. Ella se dirigió hacia mi.
-Hola _____, soy April, la hermana de Ashley, es un placer conocerte. -Me dio un leve abrazo pero me mostró una sonrisa con brackets. Era delgada y tenía un delicado rostro que parecía de porcelana, era pálida y su largo cabello castaño claro caía sobre sus hombros.
-Hola April, el gusto es mío. -De pronto un hombre enorme rubio con ojos avellana entró lleno de valijas a cuestas.
-Hey papá, ¿te dejaron a cuestas con las maletas? -Comentó Ash divertido, él las dejó todas en el suelo.
-Por desgracia si. ¿Cómo has estado Ashley? -Contestó abrazándolo.
-Muy bien, ¿tú?
-También, gracias, te extrañamos. -Se dirigió hacia mi poniéndome nerviosa. -Hola, tú debes ser _____. Mi nombre es Jacob Stymest, es un gusto conocerte.
-El gusto es mío señor Stymest, _____ Worsnop Evans.
-Hija de Daphne Evans si no me equivoco.
-Exactamente. -Asintió con la cabeza y me estrechó la mano.
-No seas tan serio cariño. -Dijo Cheryl tomando su mano.
-Lo lamento, espero no haberte incomodado, llámame Jacob. -Pero sus palabras no sirvieron, me resultaba muy intimidante.
-No hay ningún inconveniente señor. Les doy la bienvenida nuestro hogar. 
-Tienen una preciosa casa chicos, es un hermoso ambiente familiar. 

 Al acabar la cena que había preparado comenzaron las preguntas.
-¿A qué te dedicas _____? -Preguntó April que parecía tener 30 en vez de 19.
-Comencé a trabajar en una revista local hace poco, pero estoy tratando de entrar a la industria musical, ¿y tú?
-¿A qué desearías dedicarte específicamente? ¿Cantas? Yo estoy comenzando mi camino hacia el modelaje siguiendo los pasos de Ash.
-Te deseo mucha suerte. Si, pero también toco la guitarra y el violín, me gustaría dedicarme a algo así.
-Me impresiona, eres en verdad talentosa, y muchas gracias, lo mismo digo. -Todos nos sobresaltamos al oír el sonido del timbre, me paré y caminé hacia la puerta pensando quién podría ser. Al abrir me encontré con Jared respirando agitado con lágrimas en los ojos.
-¡Jared! ¿Qué sucedió? -Tomé sus hombros pero seguía igual.
-Oh _____. -Contestó sin aire comenzando a sollozar en mi hombro abrazándome.
-Ya, tranquilo, cuéntame qué sucede.
-Austin y Andy. -Dijo otra vez tratando de recuperar el aire.
-¿Qué sucede con ellos? -Me soltó y me miró a los ojos ya un poco más tranquilo.
-Chocaron hace una media hora, se los llevaron de urgencia al hospital. Austin todavía está inconsciente, perdió algo de sangre y se quebró el brazo, pero no está tan mal como Andy. Están tratando de parar una hemorragia interna, hay un 50% de posibilidades de que no sobreviva.
-No puede ser... espérame en el auto, en un segundo estoy aquí. -Contesté entrando otra vez a la casa tratando de controlar mi respiración y mis lágrimas, caminé hacia la sala otra vez y me dirigí a Ash. -Austin chocó, está grave, iré al hospital con Jared. -Le susurré aguantando el nudo en la garganta.
-¿No quieres que te acompañe? 
-No es necesario, quédate con tu familia, estaré bien, no te preocupes. Te llamaré. -Asintió con la cabeza.
-Cuídate.
-Lo haré. -Contesté besando levemente sus labios y retirándome sin dar ninguna explicación. Tomé mi chaqueta, mi teléfono y salí, me subí al auto y Jared comenzó a conducir en total silencio tratando de mantener la calma.
 Al llegar al hospital tuve que detenerme en el medio de las escaleras abalanzándome sobre Jared y llorando desconsoladamente en su hombro.
-Estarán bien, no te preocupes. -Dijo también llorando.
-Estoy muy preocupada, si a alguno de los dos le sucede algo yo moriría. 
-Tranquilízate, te juro que no sucederá nada, ¿bien? Entremos. -Secó mis lágrimas, besó mi mejilla y ambos entramos hacia la sala de espera, donde Vic, Oliver, el padre de Austin, Danny, Kellin y sorprendentemente Taylor, la ex o actual esposa de Andy esperaban temblorosos. Clavé la vista en ella, que llevaba unos tacones enormes, leggins negros y una camiseta bastante escotada. Su cabello rubio estaba peinado en dos trenzas mal hechas y tenía el delineador corrido formando manchas negras en ambas mejillas. Sentí una punzada de lástima al darme cuenta de que los chicos la ignoraban totalmente, entonces al acabar de saludarlos me senté a su lado.
-Tranquila, todo irá bien, lo recuperarás. -Dije colocando una mano en su hombro tratando de tranquilizarla. Al verme y reconocerme se tapó el rostro y apoyó la cabeza en mi regazo tomándome por sorpresa y sollozando sin control. Acaricié su espalda tratando de tranquilizarla, algo que funcionó. Levantó la vista hacia mi.
-¿Volaste desde Francia? -Pregunté curiosa.
-Si, llegué anoche. Invité a Andy a cenar hoy y no se por qué ni cómo, pero fin cambió de opinión y aceptó. Me llamó para decirme que dejaría a un amigo en su casa, me contaron que los frenos fallaron en un semáforo y un camión los arrolló. Todo el impacto fue en la parte del conductor, por eso se hizo más daño que el otro chico. Yo... yo no sé que haría sin él, es mi razón para vivir, es todo lo que tengo, en verdad tengo muchísimo miedo.
-No tienes que perder las esperanzas Taylor, sé que estará bien. ¿Sabes? Algunas veces los doctores exageran, debe estar mejor de lo que describieron, solamente mantente tranquila y recuerda que no estás sola.
-Eres la mejor persona que conocí en mi vida _____, lamento muchísimo haber pensado mal de ti, te agradezco de corazón. -Me dio un fuerte abrazo haciéndome sonreír.
 Unas horas luego las puertas de la sala de operaciones se abrieron de golpe y un doctor caminó hacia nosotros con expresión de cansancio.
-¿Son familiares de los señores Carlile y Biersack?
-Amigos, ella es la esposa de Biersack y el padre de Carlile. -Contestó Jared otra vez nervioso señalando a ambos.
-Bien, el señor Carlile se está estabilizando bastante rápido y acaba de despertar hace unos minutos. En cuanto al señor Biersack, la operación ha sido exitosa y logramos detener la hemorragia, pero necesitamos llevar a cabo otra cirugía para colocar placas en los huesos rotos. Todavía está inconsciente, les puedo dar cinco minutos para verlo.
-Te lo dije Tay. -Le dije con una enorme sonrisa de oreja a oreja, ella volvió a abrazarme.
-Muchas gracias, tenías toda la razón y por eso quiero que lo veas primero. -Asentí con la cabeza y seguí con el paso lento al doctor hacia las habitaciones. Al entrar cerró la puerta detrás de mi dejándome sola en la fría sala. Me senté en la silla junto a la camilla, se veía terrible y no pude contener las lágrimas. Se veía tan pacífico, pero jamás pensé que desearía tanto que abriera los ojos y me observara con sus preciosos ojos azules. Tenía un corte en el labio y otro en la mejilla junto a varios moretones y vendas. Estaba lleno de cables y lo único que se oía en la habitación era el pitido de la pantalla que mostraba el ritmo de su corazón, ése que un día me perteneció por completo.
-Hola... Sé que tal vez no me oigas, pero igualmente te lo diré: Estoy oficialmente comprometida, aunque tal vez la idea no te guste tanto, pero es la realidad y debes aceptarla. Por otro lado recuerdo cuando estaba en el hospital y me propusiste ser amigos, ahora me gustaría hacerte esa propuesta a ti, porque me encantaría volver a ser tu amiga, te necesito, hasta podría convencer a Ash para que seas el padrino de Savannah o Dylan. Si, decidimos llamarlos así, como en tu carta. En verdad no sé como recordaste los nombres, no tenía ni idea de que tenías una memoria tan buena... Bien, creo que debería dejar entrar a Taylor, ¿puedes creer que voló desde Francia solamente para verte? Deberías reconsiderar perdonarla cuando despiertes, se preocupó demasiado por ti y noté que en serio te ama muchísimo, dijo que eras su razón de vivir y todo lo que tenía, es una buena chica, aunque no me gusta la forma en la que trató de reconquistarte, se vistió como una... no lo sé, no creo que sea correcto decirlo, pero en otras palabras tiene una vestimenta bastante provocativa. Juro que volveré mañana para ver como sigues, y más te vale que sigas vivo... te quiero mucho, en verdad. -Solté su mano, besé su mejilla y salí de la habitación indicándole a Taylor que ya podía entrar.
 Al llegar a casa me di cuenta de que eran las cuatro de la mañana, abracé a Jared una vez más y me despedí, luego me bajé, entré silenciosamente a la casa, subí las escaleras y observé a Ash acostado en la cama, me coloqué el pijama y me recosté a su lado tratando de no despertarlo, pero no lo logré, abrió los ojos de par en par al sentirme.
-Hola, siento despertarte.
-Estaba despierto, no me gusta dormir sin ti.
-A mi tampoco. -Besé su mejilla.
-¿Qué tal está?
-Bien, mejorando, despertó y se está recuperando de a poco. -Contesté nerviosa mirando hacia el techo.
-¿Te sucede algo? -Recordé la pálida cara de Andy con los ojos cerrados y el sonido de la máquina y una lágrima recorrió mi mejilla lentamente, la sequé y negué con la cabeza, él me tomó de la cintura y besó mi cabello. -Cuéntame, no me gusta verte llorar.
-No sé si reaccionarás de mala manera. -Frunció el ceño.
-Te prometo que no lo haré... -Me quedé un minuto en silencio y volví a mirarlo.
-Andy manejaba el auto. -Se quedó mirándome un minuto y luego de volver a besar mi cabello me soltó y me dio la espalda. -Oye, prometiste que no reaccionarías de mala manera.
-Si, es verdad. -Abracé su espalda desnuda. 
-Por favor, no te enfades conmigo, sabes que no significa nada para mi.
-No es éso _____, él no me importa, sé que me amas, lo siento, lo noto. Lo que me enfada o molesta es que no me lo hayas dicho, ¿no confías en mi?
-Claro que si Ashley, pero es que no sabía como reaccionarías ante ello. -Se dio la vuelta.
-Te diré algo... esto es el principio, no es nada, mi enfado se esfuma fácilmente y más contigo, lo sabes. Pero si nos casaremos no me gusta que me ocultes las cosas, porque yo te cuento absolutamente todo. Sé que no va a ser fácil ni todo perfecto, pero vale la pena por ti, y trataré de que nuestra vida esté lo más cerca a la perfección posible, sin secretos...
-Sin secretos desde ahora, lo juro. -Besé sus labios y volví a abrazarlo recostándome sobre su pecho.
-Te amo. -Susurró.
-Y yo a ti, más que nada...



6 comentarios:

  1. Esta nove me da mucho sentimiento!!1 :') Seguilaa

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  2. aaaaaaay Omg Me va a dar un ataque JAZ! yo creo que esta temporada va a ser mas larguita que las anteriores, me encanta ♥ , Ojala la sigas pronto Uasha (:

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  3. wow tienes una gran imaginacion felicidadez

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  4. Uuuuhhh dios,me muero *-* y mi maratón? :c ... Bueno,siguela,preciosa :)

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